Una vez que se ha decidido en invertir en la adquisición de un tractor, hay que asignar una cantidad de dinero para su mantenimiento, que dependiendo del modelo y del proveedor tendrá ya establecidas acciones específicas y tiempos para cada una de ellas. Sin embargo, el uso diario del tractor requiere de ciertos cuidados, para prevenir fallas o averías y mantener su óptimo funcionamiento. Este cuidado garantizará al productor obtener el mejor precio de venta para sustituirlo, una vez que cumplió su vida útil.
Los cuidados que deben darse a grandes rasgos con respecto a el tractor son físicamente, en su aspecto mecánico, para detectar cualquier cambio o señal de alarma que indique atención de tal manera que el costo para mantenerlo sea el mínimo posible: preventivo y no correctivo. En este sentido, los niveles de aceite y otros fluidos que requiere un tractor deben ser supervisados constantemente, preferentemente antes de iniciar una jornada de trabajo y al terminar.
Otra consideración es el tipo de terreno, existen diferentes tipos de tractores para adaptarse a cultivos y tipos de suelo. Dependiendo de la actividad a realizar, existen diversos implementos que se adaptan al mismo. El desembolso en implementos es una inversión más que un gasto ya que además de mantener el tractor y evitar un uso inadecuado que lo podría dañar, le da al productor la realización de las tareas en el menor tiempo posible.
Por otra parte, cuidar correctamente el tractor, garantiza que cumpla las horas de vida útil para las que fue diseñado. Cabe mencionar que cada productor, de acuerdo a sus necesidades, requiere de un número diferente de horas de trabajo con su tractor. Es decir, la vida útil del tractor se puede alcanzar en diferentes periodos de tiempo (años principalmente), dependiendo de: tipo de cultivo, tipo de suelo, extensión del cultivo, diversificación de cultivos.
Finalmente, hay que considerar que el tractor debe resguardarse en un lugar en donde esté protegido del sol y del agua.